Un lugar imprescindible en un viaje a Cancún es Chichén Itzá, está situado a unos 200 kilómetros al oeste de la ciudad y es ideal para pasar el día y fascinarse con la antigua civilización maya.

Chichén Itzá es un sitio arqueológico ubicado en la península de Yucatán. Fue una ciudad próspera que alcanzó su apogeo entre los siglos IX y XII d.C. Su ubicación estratégica en el paisaje kárstico de la región lo convirtió en un importante centro político, religioso y comercial en su tiempo.

Una de las estructuras más emblemáticas es la pirámide de Kukulcán, también conocida como El Castillo. Esta imponente pirámide escalonada es un monumento a la precisión astronómica de los antiguos mayas. Durante los equinoccios de primavera y otoño, se produce un fenómeno fascinante, sombras en forma de serpiente descienden por la escalinata norte, creando la ilusión de que Kukulcán, la serpiente emplumada, desciende del cielo.

Otras estructuras destacadas son el Juego de Pelota, uno de los campos de juego de pelota más grandes de Mesoamérica, el Observatorio, conocido como El Caracol por su forma circular, servía como un avanzado observatorio astronómico y el Templo de los Guerreros, contiene una serie de columnas decoradas con esculturas de guerreros y otras figuras importantes de la mitología maya.

Además, no hay que dejar pasar la oportunidad de conocer el Cenote Sagrado, un pozo natural considerado sagrado por los antiguos habitantes y se utilizaba para realizar ofrendas a los dioses.