TRAMO 5: Del surrealismo al modernismo

Etapa 2 – Un viaje a la Edad Media
Pueblos medievales
Nos trasladamos desde la costa al interior del Empordà. Atrás van quedando la silueta del Montgrí con su castillo, montaña que divide el Alt y el Baix Empordà, y el acceso a L’Estartit, puerto de salida para visitar el pequeño archipiélago de las Medes, una de las reservas de flora y fauna marinas más importantes del Mediterráneo y visita imprescindible para amantes del buceo. Tras llegar a Peratallada, y tomar un desayuno en base a embutidos y quesos de las comarcas del Empordà, iniciamos un recorrido en burricleta (bicicletas rurales con asistencia eléctrica) por los pueblos medievales del Empordanet: el propio Peratallada, Ullastret, Canapost, La Bisbal d’Empordà, capital catalana de la cerámica; y Pals, con su inconfundible recinto amurallado.
Manzanas de Girona
Como estamos en tierras de la I. G. P. Manzana de Girona, seguimos hasta Palau Sator para visitar una sidrería en la que compramos diferentes productos derivados de esas manzanas. No solo el más obvio, la sidra, también zumos, confituras y vinagre. La ruta se acerca de nuevo a la costa, a las calas de Begur, otra de las localidades incluida en la marca Barrios y Villas Marineras. Nadie plasmó mejor las comarcas del Empordà que el escritor Josep Pla. Si nos interesa su literatura y sus paisajes es recomendable acercarse hasta Palafrugell, donde está la fundación de Josep Pla, y a Calella de Palafrugell, Pueblo con Encanto, para recorrer los paisajes de infancia del escritor, que pasó los veranos en la casa familiar de la playa del Canadell.
Taller de cocina
Nosotras seguimos hasta Palamós porque nos hemos apuntado a uno de los talleres de cocina del Espai del Peix de Palamós. En esta aula gastronómica hacemos un recorrido histórico y cultural por el consumo de pescado y aprendemos a cocinar varios platos de la conocida como cocina de barca, la que hacen los pescadores a bordo. En uno de los platos que preparamos no pueden faltar el arroz de Pals y la gamba de Palamós. Con los barcos entrando a puerto para llevar sus capturas a la lonja, que también se puede visitar para seguir en vivo la subasta, ponemos rumbo a la bodega Brugarol, cercana a Palamós, que además de destacar por sus vinos lo hace por su arquitectura, ya que fue diseñada por el estudio RCR, de la localidad de Olot, ganadores del prestigioso premio Pritzker.














